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Ideas para obtener tomas más interesantes


El paisaje no tiene mucho sentido sin una figura humana inserta en ella. Esa es mi opinión.

Una de las funciones del retrato en la fotografía de viajes es mostrar que "yo estuve ahí".

Hay, sin embargo, quienes con un pequeño esfuerzo adicional se esmeran en "contar una historia" con la imagen. Ya no sólo les interesa mostrarse a sí mismos y a los compañeros de ruta. Buscan sorprender o motivar preguntas.

Buscan que los que ven las fotos no miren el álbum como quienes repasan un aburrido catálogo de lámparas de oficina.

Y los hay quienes no aguantan la necesidad de hacer del hecho mismo de tomar una fotografía un rato de relajo...

Mal que mal, el viaje es lo más importante.

 


Busca encuadres poco frecuentes


Dicen que una imagen vale más que mil palabras y una toma como ésta
permite ilustrar lo dificultoso que fue un tramo de la
Carretera Austral, en especial en aquellos lugares donde se realizaban
labores de pavimentación.


La Mejor Hora para fotografíar

En cualquier momento pueden suceder cosas dignas de ser fotografíadas. Pero en términos de condiciones de luz, siempre serán mejores las primeras horas de la mañana y las últimas horas del día. A esas horas se puede captar la atmósfera de la que se impregna el paisaje, las personas y la naturaleza en general por las tonalidades que se producen con el ángulo de iluminación del sol.

La luz cenital del mediodía provoca, ciertamente sombras duras y contrastes de luz que pueden dar como resultados fotos "quemadas y sombras duras.


Evita en lo posible las "sombras duras"

Las "sombras duras" se producen cuando hay un gran contraste entre
la zona iluminada y la no iluminada. El ojo humano tiende a equilibrar
y a "no darse cuenta" de este efecto de luz que distorsiona el rostro. Pero la
película y los pixeles, en cambio, no son tan flexibles como el ojo humano para pasarse por alto esta diferencia y no perdona.


Prefiere el contraluz

Un modo de eliminar las sombras duras es tomando fotos a contraluz. Puedes apoyarte con elementos reflectantes (como plumavits o papel aluminio) estratégicamente ubicados que hagan rebotar la luz e iluminen el rostro.


Juega con la posición del horizonte

Es muy fome colocar la línea del horizonte en el medio del cuadro.
El horizonte alto o bajo alienta a recorrer la imagen con la vista.
Destacan el suelo o el cielo... si lo merecen.

 


Ideas para obtener tomas más interesantes
Máximas para una buena fotografía

Puntos de Interés
(regla de la proporción aurea)

Es una regla de composición bastante simple y efectiva. No coloques lo más interesante en el centro del cuadro, sino más hacia la izquierda o la derecha del cuadro.

Existe una forma de distribuir elementos en el cuadro en base a criterios estéticos que han utilizado por siglos los artistas. Se le llama la proporción aurea y se obtiene de un cálculo matemático. Puedes averiguar por tí mismo más detalles sobre cómo calcular la proporción aurea, pero lo interesante para nuestro propósito es que a partir de la relación 1.1618:1, se puede establecer una medida, por ejemplo, de dos áreas de 61.8 y 38.2 pixeles de ancho respectivamente.

Al sacar la foto, imagínate una división guardando estas proporciones tanto horizontal como vertical (observa el ejemplo). Obviamente no se trata de andar con una calculadora, porque eso no se puede. Pero sí puedes tomar conciencia de esta proporción y -antes de tomar la foto- intentar distribuir elementos visuales.

Si el sujeto o el objeto están mirando hacia la izquierda, ubicalo en el punto derecho y viceversa, si la mirada es hacia la derecha, ubica el sujeto en uno de los puntos de la izquierda.


Imagen dinámica

En esta imagen, la mirada se desplaza contra el sentido de la lectura del reloj (sujeto, fumarola que asciende, nubes, cerro iluminado hasta volver al sujeto). De ese modo, mirar una fotografía se vuelve más interesante y atractiva que la imagen de un sujeto plantado al centro.

Como dato interesante, la mirada generalmente va desde lo más grande a lo más pequeño. Fíjate en esta fotografía: la mirada comienza desde donde está el inicio de la fumarola, junto a nuestro modelo, y sube y recorre el cuadro de un modo circular pues el volumen de la fumarola pareciera que se va esfumando y achicando en ese sentido.


Elemento dominante

Antes de tomar la foto, fíjate en qué quieres destacar y encuádralo bien.

En esta imagen, el recuadro corresponde al la parte del cuadro que realmente interesa, con sus respectiva regla de los tres tercios. La parte más oscura -remarcado por nosotros mismos- es la sección que no aporta nada a la fotografía. En resumen, no tengas miedo a acercarte al sujeto y componer de modo que todos podamos apreciar en su justo tamaño lo que realmente interesa mostrar.


Simpleza

Un disco pare, el volcán y la luna. Descubre la magia de jugar con elementos simples. Muchas veces se tiende a pensar que los paisajes de desierto son menos interesantes que los bosques, por no existir árboles u otra variedad de elementos. Sin embargo, el desierto permite realizar composiciones con mínimos elementos.


Distribución

En esta foto, cada personaje está haciendo algo distinto. No hay espacios vacíos en el cuadro y al mismo tiempo se evitan las simetrías. La clave de la composición está en la distribución (foto: Aldo Buscaglia).